Mira estas 3 formas para aprender a silbar
- Frunce tus labios como cuando vas a enviar un beso.
- Deja una pequeña abertura entre ellos.
- Evita apoyar la boca en los dientes, estirándola un poco.
- Respira y expulsa el aire por esa abertura y notarás cómo se produce el sonido.
Índice
- Con la lengua
- Silbar con los dedos
- ¿Cómo silbar con los dedos en la boca?
- ¿Por qué ya no puedo silbar?
- 3 maneras fáciles de silbar con tu lengua
- ¿Cómo aprender a silbar con los dedos en la boca?
- ¿Cómo silbar fuerte paso a paso?
- ¿Cómo aprender a silbar con la boca?
- ¿Cómo aprender a silbar sin dedos?
- ¿Cómo se silba con los dedos en la boca?
- ¿Cómo aprender a silbar con las manos?
- ¿Por qué podemos silbar?
Con la lengua
- Para empezar debes pegar los labios a los dientes.
- Después, coloca la lengua detrás de los dientes inferiores, pero no dejes que se toquen.
- Sopla a través de la lengua, y por encima del labio y la dentadura inferior, produciendo un silbido de lo más estridente.
Silbar con los dedos
Haz una forma de V invertida con ellos y coloca la punta debajo de tu lengua, justo detrás de los dientes. Cierra los labios y sopla con fuerza. Es importante que siempre dejes un pequeño hueco entre los dedos e intenta graduar la potencia del aire.
¿Cómo silbar con los dedos en la boca?
Levanta la lengua de forma que la punta quede mirando hacia el paladar. Después, presiona la parte inferior de la lengua contra las puntas de los dedos índice y corazón. Sigue presionando la lengua contra los dedos sin que llegue a asomar por fuera de la boca.
¿Por qué ya no puedo silbar?
Las personas que intentan silbar y no logran desarrollar esta habilidad pueden padecer alguna condición física que imposibilite la acción. Al silbar, la velofaringe, que es un esfínter muscular ubicado en la garganta, debe cerrarse.
3 maneras fáciles de silbar con tu lengua
¿Cómo aprender a silbar con los dedos en la boca?
Silbar con los dedos
- Haz una forma de V invertida con ellos y coloca la punta debajo de tu lengua, justo detrás de los dientes.
- Cierra los labios y sopla con fuerza. Es importante que siempre dejes un pequeño hueco entre los dedos e intenta graduar la potencia del aire.
¿Cómo silbar fuerte paso a paso?
Cierra los labios sobre el primer nudillo de los dedos índice y pulgar sin dejar espacio para que escape el aire por los lados de la boca. Deja un espacio pequeño entre tu labio inferior y el interior del anillo que creaste con los dedos. Por aquí fluirá el aire, produciendo el sonido de silbido fuerte.
¿Cómo aprender a silbar con la boca?
Si introduces aire a través de este conducto, podrás generar un silbido agudo en lugar de ruidos jadeantes.
- Ubica tu lengua cerca a tu paladar al poner la punta de la lengua en la parte inferior de tus dientes delanteros. Ubica los lados de tu lengua junto a tus molares.
- Aquí la posición es muy importante.
¿Cómo aprender a silbar sin dedos?
Pon tu labio inferior hacia atrás.
Para silbar fuerte sin dedos, hay que poner los labios y la lengua en la posición correcta. Empuja la mandíbula un poco hacia delante, de modo que las comisuras de tu boca se desplacen un poco hacia las orejas. Pon el labio inferior sobre los dientes.
¿Cómo se silba con los dedos en la boca?
Levanta la lengua de forma que la punta quede mirando hacia el paladar. Después, presiona la parte inferior de la lengua contra las puntas de los dedos índice y corazón. Sigue presionando la lengua contra los dedos sin que llegue a asomar por fuera de la boca. Cierra la boca alrededor de los dedos.
¿Cómo aprender a silbar con las manos?
Consejos
- Mantén los nudillos de los pulgares bien juntos.
- Trata de encontrar el punto ideal.
- Trata de soplar hacia abajo dentro de tus manos.
- Mientras soplas en la pequeña abertura entre tus pulgares, asegúrate de que también haya un espacio para que el aire fluya hacia afuera de las palmas cerradas.
¿Por qué podemos silbar?
Un silbido, o acción de silbar, es el sonido producido al expulsar aire a través de los labios fruncidos con ocasional ayuda de los dedos, por lo general agudo, aunque puede ser relativamente grave y alcanzar al menos cuatro octavas.